Podría ser la combinación perfecta para unas vacaciones gay al sol de Brasil. Una semana para descubrir Río de Janeiro, sus paisajes, su vida bulliciosa y los cariocas. Y unos días en Florianópolis, capital del estado de Santa Catarina, el balneario más gay de Brasil, por sus playas o su carnaval gay.
Río de Janeiro. La postal perfecta. Así que, una vez que llegues, no esperes a deleitar tus ojos. Surca los cielos y aborda los dos iconos de Río: el Corcovado y el Pan de Azúcar.
El Corcovado y la estatua del Cristo Redentor se elevan a más de 700 metros. No hay que fiarse de las nubes o de la ausencia de ellas antes de iniciar el ascenso en funicular: ¡toma asiento a la derecha en la subida (por la vista) y reza para que la cumbre esté despejada cuando llegues! Si las nubes te dan una tregua (no dudes en esperar en la cima), descubrirás el grandioso espectáculo de la bahía, el Pan de Azúcar y las playas más bellas de la ciudad.
Para el Pan de Azúcar (Pão de Açúcar), prueba tu suerte al atardecer. Si las nubes no te juegan una mala pasada, disfrutarás de una impresionante vista panorámica del vertiginoso terreno de la bahía. ¡Cuidado con los monitos, no son nada amistosos!
Entonces, ¡vamos a las playas, por supuesto! Copacabana, la más famosa, extendida como una luna creciente a lo largo de más de 4 kilómetros, es el escenario de las mayores fiestas y tiene una sección gay, frente al mítico Palacio de Copacabana. Pero la playa gay que te unirá para siempre a Río esIpanema.
Las banderas gay ondean orgullosas entre los puestos de guardia 8 y 9, en una de las zonas más exclusivas de la ciudad. Ten cuidado, en tu tumbona y bajo tu sombrilla, alquilada por unos pocos reales a los sublimes chicos de la playa (que también saben mezclar muy bien las caipirinhas), correrás el riesgo de recalentarte: tus ojos tendrán que elegir entre el océano embravecido, las colinas de los Dos Hermanos, en la distancia, detrás de las cuales el sol cae cada tarde entre aplausos, o las "colinas" de los cariocas que son las más bellas del mundo.colinas" de los cariocas que se exhiben despreocupadamente en su sunga, esos característicos trajes de baño brasileños.
¿Los chicos de Ipanema? Puras bombas, ¡incluso más sexy bajo los ojos que en la leyenda!
Por la noche, dirígete al barrio gay, alrededor de la calle Farme de Amoedo (frente a la playa gay de Ipanema), con sus bares y restaurantes. No te sorprendas, fuera de la Nochevieja o del Carnaval, la zona puede parecer bastante tranquila. Los vecinos de São Paulo te dirán que Río es sólo un pueblo y que la escena gay aquí es más bien modesta. Benjamín, propietario de Casa Mosquito, el único hotel boutique de Ipanema, confirma que, aparte de los pocos domicilios de homosexuales, los heterosexuales y los gays suelen seguir el mismo circuito, y las fiestas están muy mezcladas.
Aquí tienes algunas sugerencias: para tomar una copa y conocer gente nueva, el bar To Nem Ai; para cenar, Zazá Bistrô y su decoración tropical; para bailar, el Café Galeria (los miércoles y jueves) o el Boy (los viernes).
Si quieres pasarlo bien, ve a The Week el sábado por la noche, el verdadero local de copas de Río, una hermana pequeña de The Week en São Paulo. ¡Incluso hay una piscina dentro!
Para disfrutar de un Río más auténtico, prefiere el barrio de Lapa, en el centro, que cobra vida al caer la noche y está lleno de pequeños bares y restaurantes. Es en el Centro donde también encontrarás los principales museos y monumentos durante el día, mientras te abres paso entre los edificios más modernos
También es desde aquí donde puedes tomar el ferry hasta el Museo de Arte Contemporáneo Oscar Niemeyer de Niterói (en la foto de abajo), desde donde puedes admirar todo el horizonte de Río y el impresionante terreno de la ciudad.
Para desplazarte, no tengas miedo de caminar (¡evita las chanclas!). El metro, aunque es bastante limitado, da servicio a los principales puntos turísticos, incluida la playa de Ipanema, pero necesitarás una combinación de metro + autobús (Integração Expressa) para llegar a tu destino (la estación de Botafogo para el Pan de Azúcar y Largo do Machado para Corcovado). En cuanto a los taxis (los amarillos, ¡y sólo los amarillos!), puedes confiar en ellos (tarifa 1 durante el día, 2 por la noche a partir de las 21 horas).
Para las compras, prepara tus reales, la ropa es cara. En las tiendas de Leblon, encontrarás camisas brasileñas por 70 euros. Unas chanclas locales mucho más baratas (no nombraremos la marca) serán un regalo perfecto para los amigos de casa. Y si quieres llevarte un poco de sol brasileño, los productos de belleza Granado, con sus característicos aromas.
Olvida lo que te han dicho sobre la inseguridad, las cosas han cambiado en Río. Aquí te sentirás tan seguro como en cualquier capital europea. El único consejo: no lleves objetos de valor a la playa y no dejes la toalla sin vigilancia.
Y por último, pero no menos importante, llega a mitad de semana, para que estés en plena forma cuando llegue el fin de semana. Y para recuperarte del fin de semana, dirígete al sur, aFlorianópolis, durante unos días
La vista sobre la bahía de Río desde el Pan de Azúcar
FLORIANOPOLIS
A una hora y media de vuelo desde Río, Florianópolis, Floripa para los amigos, es la capital del estado de Santa Catarina. Situada en una isla, a un paso de tierra firme, es famosa por sus playas. Esta estación balnearia es ahora uno de los lugares gay más populares de Brasil, especialmente entre Navidad y Año Nuevo, en la época del Carnaval, en febrero, o durante su Festival de la Diversidad, en septiembre.
Con casi 50.000 participantes, el Carnaval Gay de Floripa se ha convertido en uno de los principales acontecimientos de la isla. The Week, la legendaria discoteca gay de Sao Paulo y Río, aprovecha incluso para abrir cada año una discoteca temporal en el Eco Village de Praia Mole, en la costa oeste de la isla
Es aquí, a 20 kilómetros al este de Florianópolis, donde ocurre todo, en las hermosas playas de arena rubia de Praia Mole (gay) o Galheta (nudista y más traviesa). El Bar do Deca, al aire libre, ofrece entretenimiento, con cócteles, DJs y algunas fiestas memorables
En la ciudad, un bar, el Mix Café Club, dos saunas, Thermos Oceano y Club Hangar, y dos discotecas, Jivago y Concorde, constituyen el grueso de la vida nocturna gay de la isla en todas las estaciones
Cuidado, la isla es grande. Así que asegúrate de comprobar dónde te alojas antes de reservar. Los autobuses van de Floripa a las playas, y son baratos, pero puedes perder mucho tiempo en transporte si estás lejos de Praia Mole. Los taxis son caros. También puedes alquilar un coche.
Playa Mole en Florianópolis © Ricardo Ribas / Santur SC
Después de este interludio junto al mar, en este pequeño paraíso de los surfistas, será el momento de tomar la carretera hacia Río. Una última parada, la oportunidad de disfrutar de la playa una última vez, del calor de la noche carioca, antes de tomar tu vuelo de vuelta a casa. Seguro que volverás!
El Bar Do Deca en Florianópolis
Cómo llegar:
Recientemente hasido elegida"Mejor compañía aérea de Sudamérica" por segundo año consecutivo en los premios World Airline Awards. tAM Airlines, la compañía aérea nacional y miembro de la Star Alliance, opera vuelos a 45 destinos en Brasil y a 19 destinos internacionales, especialmente desde París.
La aerolínea ofrece un vuelo diario directo a Río de Janeiro desde París, y otros 7 vuelos con escala en São Paulo. También ofrece varios vuelos diarios entre Río de Janeiro y Florianópolis (1h30).
Información y reservas en el 01 53 53 80 00
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