Montpellier, ciudad arco iris

06 feb. 2014

por Frédéric Maurice / TÊTU

Para alegrar sus fríos fines de semana de invierno, los hombres homosexuales no tienen muchas opciones. Algunas estaciones de esquí que aprovechan su legendario poder adquisitivo. O ciudades gay-friendly que, en su mayoría, están hibernando. En esta Francia helada, hay una excepción: Montpellier. No sólo porque el invierno es suave y soleado. La segunda ciudad más amable de Francia (véase Têtu, marzo de 2009) no tiene temporada baja. Su comunidad gay acaba incluso de celebrar una fiesta de inauguración de su nueva Maison des LGBT.

El Orgullo Lésbico y Gay de Montpellier-Languedoc-Rosellón es, en efecto, una de las primeras asociaciones que se ha hecho dueña de su sede, triplicando su superficie. Montpellier se supera constantemente. Con dieciocho mil personas contabilizadas por la policía, la Marcha del Orgullo, la segunda más grande del país, ha vuelto a batir su récord en la ciudad. "Es porque hemos regionalizado la asociación", dice Vincent Autin. El presidente de la asociación organizadora quiere ir más allá y dotar a cada uno de los barrios populares de la capital de la región de Languedoc-Rosellón de una carroza para marchar.

En cuanto a la alcaldesa, no se queda atrás. La autora del famoso "Appel de Montpellier" a favor de la introducción del matrimonio entre personas del mismo sexo en Francia, Hélène Mandroux, lo incluyó en el programa socialista para las próximas elecciones presidenciales. A raíz de esto, dijo que estaba "dispuesta a hacer campaña por el derecho a la adopción" para gays y lesbianas.

Con un pequeño Marais que gravita en torno a su plaza Marché-aux-Fleurs, la prefectura del Hérault también abunda en direcciones amables. Incluso hay un óptico y un farmacéutico que exhiben la bandera del arco iris La ciudad también tiene sus cabezas de cartel. Personalidades abiertamente homosexuales como Jean-Paul Montanari, director del festival Montpellier Danse, y Jean-Marie Besset, propietario del Théâtre des 13 Vents, sin olvidar a deportistas de alto nivel muy simpáticos: el jugador de balonmano Nikola Karabatic y el muy sexy campeón de Europa de decatlón Romain Barras. La ciudad también alberga una veintena de asociaciones LGBT, como el único centro de acogida francés para jóvenes víctimas de la homofobia (Le Refuge), un club de rugby (Los Valents) y un grupo de sordos (Ghandis). Montpellier también puede presumir de dos "monumentos nacionales" de la comunidad gay: el club La Villa rouge y la playa de la Espiguette

La oficina de turismo de Montpellier tiene una sección gay en su página web

"Montpellier está llena de gays", afirma Hussein Bourgi, presidente del Comité contra la homofobia. Esto se confirma en los bares y saunas: hay gente todas las noches. Y en las calles, el gaydar se vuelve loco. Es imposible no sentirse inmediatamente a gusto. "Es una ciudad muy atractiva para los gays", dice Olivier Richaud, de 41 años. Como muchos, el autor del blog Jeff et Olivier es "un montpellieriano de adopción". "Lo mismo ocurre con Ludovic Pelletier, productor de Menoboy, uno de los tres mayores estudios de clasificación X de Francia, que lleva tres años en la ciudad. "¡Nunca más me moveré de aquí! Con mi novio, vivimos en una bonita casa, todos nuestros vecinos nos conocen y están al tanto de mi actividad profesional. no hay ningún problema, hay una gran apertura.

Antes de su muerte en 2010, Georges Frêche, padrino político de la región, había manchado la imagen idílica de Montpellier con sus reiteradas declaraciones reaccionarias, pero la mayoría de los homosexuales, sin embargo, elogiaron a un "alcalde" que había tenido un gran éxito.sin embargo, la mayoría de los gays saludaron a un "alcalde visionario" y a un "amigo inquebrantable de los gays, que había cedido un local al Grupo de Liberación Gay en 1979, tres años antes de la despenalización".

Encuentra todas las direcciones gay y gay-friendly de Montpellier en la guía gay de Montpellier

(Foto principal © Françoise Dorelli / Têtu)