¡Holandesa y una isla francesa! Efectivamente, en San Martín, franceses y holandeses comparten la isla en mayor armonía. Pero la isla tiene otras peculiaridades: hablan inglés y es un paraíso fiscal. No es de extrañar que allí los comercios se desarrollen rápidamente y abunden los turistas. La costa norte de la isla es más propicia a la laxitud y a pasear por las hermosas playas de arena blanca. Pero si te aventuras al centro, llegarás al corazón de la isla y descubrirás sus secretos, antiguas tradiciones aún muy respetadas y una comunidad fuerte y apegada a sus costumbres. San Martín y sus alrededores ofrecen una variada y exótica gama de actividades: una tarde de buceo en las aguas cristalinas de la isla, subir al volcán "Monte Scenery", perderte en la vegetación tropical de la isla, s intentar hacer kitesurf o empaparte del rico patrimonio cultural de San Cristóbal mientras escuchas las historias que cuentan los lugareños. En cuanto a la homosexualidad en la isla, las parejas homosexuales pueden casarse en la zona holandesa y tienen los mismos derechos que los heterosexuales. La isla tiene tantas instalaciones y playas gay y gay-friendly como la East Bay, la playa más larga de la isla. Estas instalaciones y playas te acogerán con gran facilidad.